25/May/2016
El Parque Cultural de Valparaíso ha querido programar la función teatral y las actividades complementarias con Ictus, un Laboratorio y un Conversatorio, en el marco de la celebración del Día del Patrimonio Cultural Nacional, entendiendo que este grupo de actores son muestra viva de nuestro Patrimonio Cultural, manifestado en actores…
El Parque Cultural de Valparaíso ha querido programar la función teatral y las actividades complementarias con Ictus, un Laboratorio y un Conversatorio, en el marco de la celebración del Día del Patrimonio Cultural Nacional, entendiendo que este grupo de actores son muestra viva de nuestro Patrimonio Cultural, manifestado en actores de una dilatada trayectoria.
La obra cuenta con la actuación de destacados actores del elenco original como Edgardo Bruna y José Secall, en esta ocasión, se suma Otilio Castro y Adela Secall. La dirección está a cargo de Paula Sharim.
La noche de los volantines es la primera obra que Ictus estrena con la vuelta a la democracia en Chile. En 1989 aún era difícil hablar de lo que nos estaba pasando como país. Sin embargo, este montaje que se presentará en el Parque Cultural de Valparaíso el próximo sábado 28 de mayo a las 20 horas, toma con fuerza el proceso que vive actualmente el país, en donde al parecer ha llegado el momento de volver a construir, donde debemos entender los procesos, para reparar y avanzar.
Ahora, en el 2016, el remontaje de esta emblemática obra cobra un sentido parecido al de aquella época, 26 años después el país se encuentra hablando de la profunda incertidumbre en la que hemos caído respecto a nuestra existencia en un país donde parece que la memoria se fragiliza cada vez más.
Ictus celebra 60 años y quiere compartir esta alegría en el Parque Cultural mostrando sus resultados de creación colectiva, sus constantes transformaciones como grupo, su forma de trabajo también colectivo y fundamentalmente cruzar experiencia entre de maestros del teatro que han visto pasar medio siglo de la historia del teatro chileno.
La obra cuenta con la actuación de destacados actores del elenco original como Edgardo Bruna y José Secall, en esta ocasión, se suma Otilio Castro y Adela Secall. La dirección está a cargo de Paula Sharim.
Además, el Parque Cultural de Valparaíso ha querido programar la función teatral y las actividades complementarias con Ictus, un Laboratorio y un Conversatorio, en el marco de la celebración del Día del Patrimonio Cultural Nacional, entendiendo que este grupo de actores son muestra viva de nuestro Patrimonio Cultural, manifestado en actores de una dilatada trayectoria.
La trama
Tres empleados públicos reunidos en lo que aparentemente es un pub, apartados del centro de la diversión del lugar, envueltos en la borrachera de la búsqueda de Raúl, su cuarto inseparable amigo, intentan llegar a un lugar conocido, intentan saber dónde están, en qué momento están y si podrán salir de este lugar que aún no pueden habitar.
Laboratorio con ICTUS
El Laboratorio teatral para artistas escénicos denominado “Deconstrucción de una escena de creación colectiva” estará a cargo de las actrices María Elena Duvauchelle y Paula Sharim con el trabajo de Roberto Poblete en el ejercicio y dirección. El objetivo de este ejercicio es mostrar y desentrañar las claves de la creación colectiva a través de una deconstrucción teatral de una escena que fue parte de una obra emblemática del grupo, “Atascados en Salala”, y cuyos ejes dramáticos y creativos representan muy ampliamente lo que es ICTUS. La deconstrucción de la escena, nos dará posibilidad también de comprender cómo en la creación artística y dramatúrgica de una pieza completa de creación colectiva influyen no solo las posturas artísticas, estéticas e ideológicas de un grupo sino que también el azar y la contingencia.
Conversatorio ICTUS – ATEVA
Instancia de conversación a partir de las experiencias de Ictus y la Agrupación Teatral de Valparaíso, ATEVA, artistas reconocidos y de larga trayectoria de Santiago y Valparaíso a cargo del actor y director Roberto Poblete. El objetivo es compartir sus resultados de creación colectiva, sus constantes transformaciones como grupo, su forma de trabajo también colectivo y fundamentalmente cruzar experiencias entre maestros del teatro que han visto pasar medio siglo de la historia del teatro chileno.
Función obra: sábado 28, 20 horas, RETIRAR INVITACIONES EN EL PARQUE DESDE EL LUNES 23.
Laboratorio: domingo 29, 10 horas.
Conversatorio: domingo 29, 12 horas.
La larga trayectoria de Ictus
La historia de ICTUS parte con una disidencia, la de un grupo de estudiantes de tercer año del Teatro Ensayo de la Universidad Católica (TEUC) que en 1955 decide abandonar dicho plantel en procura de una experiencia teatral distinta. La necesidad de dotar contenido a lo que hasta ese momento era solo una insatisfacción compartida los conduce a una indagación genealógica cuyo resultado es el estreno de La tertulia de los dos hermanos y Las suplicantes, las dos primeras obras del grupo, ambas en 1956.
Aunque las dificultades de tomar distancia del modelo de teatro universitario provocan algunas deserciones, el grueso de sus integrantes logra aglutinarse gracias a un sostenido trabajo de experimentación que imprime un primer rasgo de identidad al grupo. La segunda mitad de esa década estará centrada en los intentos por asentar un trabajo teatral distintivo, elaborando respuestas prácticas a las limitaciones técnicas y la precariedad material, en un marco de ausencia de referentes teóricos definidos. Esta mezcla de intuición, plasticidad y apertura marca los primeros años de ICTUS como “grupo experimental”.
La década de 1960 es el punto inflexión que posibilita el tránsito hacia la institucionalizacion. La instalación en la sala La Comedia en 1962, que desde ese momento se convertirá en base y trinchera de ICTUS, trae consigo exigencias que imponen una organización más compleja.
En 1969 ICTUS cruza las paredes de La Comedia y prueba su fórmula creativa en Televisión Nacional de Chile con el programa “La Manivela”, emitido sin interrupciones hasta 1973.
Tras el Golpe de Estado de septiembre de 1973, la censura y la restricción a los derechos civiles convierten a la sala La Comedia en espacio de resistencia. Las obras de ICTUS comienzan a vocalizar los miedos y esperanzas de una comunidad política que lentamente se rearticula.
El férreo compromiso de los actores y actrices de ICTUS con la recuperación de la democracia y la defensa de los derechos humanos convertirán a la compañía en un referente indiscutido de la escena cultural de la post-dictadura.
Reafirmando ese compromiso histórico, ICTUS se apresta a celebrar sus primeros 60 años como una de las compañías más antiguas del continente y donde han trabajado generaciones de artistas conjurados en la inquebrantable promesa de seguir haciendo de este teatro un espacio de libertad.