Exposición
27/Nov/2023
El sábado 11 de noviembre fue la inauguración de “Cielo rojo y verde y azul” en la Sala Laboratorio del Parque Cultural de Valparaíso – Ex Cárcel. Gonzalo Reyes Araos, el artista, aborda las relaciones entre tecnología, naturaleza y comunicación contemporánea a través de poesía, píxeles pintados y estructuras de…
El sábado 11 de noviembre fue la inauguración de “Cielo rojo y verde y azul” en la Sala Laboratorio del Parque Cultural de Valparaíso – Ex Cárcel. Gonzalo Reyes Araos, el artista, aborda las relaciones entre tecnología, naturaleza y comunicación contemporánea a través de poesía, píxeles pintados y estructuras de luz. La exposición estará disponible hasta el domingo 10 de diciembre con entrada gratuita.
Samuel Toro Contreras, curador de la exposición, señala: “En general no hago muchas curadurías, pero cuando vi la obra de Gonzalo me interesó mucho y me ofrecí para cumplir este rol. De acuerdo a las teorías de los desplazamientos esto no deja de ser pintura, sigue siendo un trabajo pictórico. Gonzalo es un pintor contemporáneo que utiliza los nuevos medios para pintar, la luz y el color conforman lo pictórico, llegando de todas formas a las teorías del color”.
Sobre la relación de la obra con los públicos considera que “tradicionalmente se entiende que los procesos de uso de las nuevas tecnologías están ligados a gente de una generación relativamente joven, pero no es el caso. A Gonzalo no le interesa trabajar con la espectacularización de la tecnología, como le pasa a muchos artistas mediales, sino que busca lo mínimo para hablar de un sistema complejo. La recepción del público es transversal. Aquí suceden tres tipos de transducciones, lo que permite llegar de los poemarios a la codificación del color, y desde esa codificación a la programación y comportamiento predictivo de los los triángulos que van cambiando su apagado/encendido. La exposición es abierta a la interpretación de cada persona, más allá de lo pensado por el artista y por la curadoría, el arte tiene esa característica y la densidad crítica de esta obra permite múltiples lecturas”.
Gonzalo Reyes Araos, artista, comenta: “El título de la exposición fue dado por una suerte de inteligencia artificial que reside en nuestros teléfonos, sugerido por el teclado predictivo, el mismo que utilizo para escribir poemas. Suena como una falta de ortografía incluir ‘y’ dos veces. Eso, generado por el teléfono, puede ser una suerte de glitch. De alguna manera el accidente es también parte de la existencia de esa inteligencia artificial, lo que no está supeditado a las órdenes humanas. El error es una manifestación de su existencia, de su propio ser”.
El título se vuelve imperante considerando la siguiente perspectiva manifestada por Gonzalo: “Las pantallas de computador y de teléfono son una suerte de filtro por donde pasa la mayor parte de la información que consumimos. La manera de entender al mundo sucede a través de los filtros de color de estas pantallas. Si hubiese alguna suerte de determinación de colores para graficar un momento cultural en cuanto a las tecnologías, definiría el rojo, verde y azul como los que están marcando nuestro presente”.
Sobre la elección de los colores desarrolla: “Hay dos espacios colométricos básicos, el color pigmento y el color luz. Cuando mezclas pigmento el cian, el magenta y el amarillo son la gama de colores básicos. Cuando atraviesas un prisma a un haz de luz esta se divide en rojo, azul y verde y a través de ellos se forma el resto de los colores. Los espacios colométricos del pigmento los asocio a un nivel material, y los de la luz a una dimensión espiritual, por eso Cielo, aludiendo a una dimensión del subconsciente, incluso del propio entendimiento del universo digital.
La experiencia migratoria de Gonzalo Reyes ha influido mucho en su búsqueda de emplear la tecnología como extensión de la pintura. Estando en China, por una residencia artística, sufrió un accidente en moto que lo mantuvo en cama durante un mes. Esto lo forzó/invitó a repensar sus formas de hacer:
“Empecé a utilizar la pantalla como soporte, no me podía mover de la cama, tenía que ocupar el computador para desarrollar todo mi proceso creativo. Le pedí a mi mamá que me mostrara escenas de la naturaleza a través de la pantalla, estando en dos lugares diametralmente opuestos en el mundo. Así empecé a experimentar con atardeceres y amaneceres, a filmar el sol en tiempo real y proyectarlo en el otro extremo del mundo, haciendo cruces entre Corea y Calama, por ejemplo. Empecé a investigar sobre las imágenes que veía a través de la pantalla, me sorprendía que me emocionaran tanto a la distancia. Experimenté abriendo imágenes, revelando el código que hay detrás, a veces completamente inteligibles, fuera de mi entendimiento, y a intervenirlos, viendo el efecto producido sobre ellos”.
“Luz y color es con lo que trabajo, eso es pintura. Yo pinto y no necesariamente con pincel. La luz también es materia. El fotón, iluminando de cierto color que invade el espacio, finalmente también es pintura. En esta exposición la estructura es una suerte de materia. Me fijo en el módulo, el píxel, que en la estructura son puros triángulos que se van adaptando a la forma del espacio. Todos esos píxeles juntos se transforman en una suerte de pantalla que muestra una transducción de los poemas. Los poemas se transforman en imágenes y esas imágenes generan números de colores, una tal cantidad de verde, azul y rojo. Con esos números construí un algoritmo que determina cuáles son los tubos que se van a encender y de qué color. Hay una relación directa entre la imágenes de la estructura con los poemas en el muro”.
Sitio web del artista.
Instagram: @gonzalo_reyes_araos
Hipótesis curatorial de Samuel Toro.